Son una suma de datos, que lo emparentan en modos, acciones y tácticas a su posible mentor. El diputado nacional cultiva un perfil mucho más bajo que mucho de sus correligionarios (aplicando la misma lógica ricardista, a más poder menos prensa) que tienen más cartel que poder de fuego o de decisión. Gustavo, como le gusta que lo llamen, armó la lista de ECO de Diputados del lugar 10 al 15, y no es un dato menor, porque armar significa delegar para Ricardo, y Gustavo hizo todo el trabajo “fino” o de tejido político y Ricardo a lo sumo, veto o sugirió alguna modificación, pero esos cinco lugares (por más que no sean salibles) los manejo el diputado. A nadie más Ricardo le delegó tal función política. Sabiendo que estamos hablando de un hombre al que no le gusta delegar ni la designación del portero de la escuela de la Isla Apipé.

Gustavo, por más que no salga en todos los diarios o las fotos (ateniéndose férreamente a la lógica ricardista de, insistimos, a más poder, menos prensa) camina lado a lado, codo a codo, la campaña con el Gobernador. Es más, Gustavo es uno de los pocos con asiento asegurado en las camionetas  “Rav” sea la de 2007 o la de 2012, o en el helicóptero símil al del Presidente Cartes del Paraguay, con el que “Ricardo se come la cancha” o mejor dicho sigue administrando el juego provincial, tal como lo suele hacer con su equipos de abogados A, los sábados futboleros, en los que el gobernador, con la ayuda de los árbitros claro está, también manda, junto a su equipo de fútbol en la tabla de posiciones del torneo de profesionales.

A diferencia del resto que sonaban, o que ya están sonados, nunca se especuló con una candidatuta de Gustavo en este turno, no sólo porque le quedan dos años más de Diputado, sino además para no desgastar su imagen, ni de ponerlo en la licuadora de nombres, sitio en donde se molieron las aspiraciones de algunos ministros radicales expectantes en la línea de sucesión.

Si bien nada está definido, ni mucho menos (el propio Ricardo, tiene su plan B y C) lo cierto es que el gobernador tendría “in pectore” a su sucesor, básicamente porque es muy parecido en su forma de entender la política, Gustavo, como su posible “padrino” político, es el más peronista de los radicales, y tiene un carisma natural que lo hacen mucho más plástico y cercano al barro, en donde le gusta meterse a Ricardo, y en donde no abundan los radicales que sepan pisar el mismo.

La política es especulación, la información sino se alimenta de percepciones, de deducciones y de especulaciones, termina siendo nada más que propaganda.

Sí usted lo conoce a Gustavo, le sugerimos que le festeje su implante capilar, que le saque charla de los principios radicales (algo que le gusta y mucho al Diputado) y cuanto más pueda vincularlo a quién bien podría ser el sucesor, arrime probablemente una posibilidad más para que su destino mejore en caso de que Corrientes, tal como se estima (para ello servirán las elecciones de 2015) continua la senda Ricardista.

Si usted no está de acuerdo con la continuidad, empieza a ver la política desde este lugar, tenga en cuenta estas especulaciones, no vaya a ser cosa, que los legisladores (como ocurrió con la actual oposición en 2013, que  la mitad de legisladores que entraron por su lista, juegan en esta elección con el oficialismo) que entren ahora, diciéndose opositores, terminen siendo, en el mejor de los casos, alguno de ellos, el vice de Gustavo.