Jueves 26 de Diciembre de 2024

Hoy es Jueves 26 de Diciembre de 2024 y son las 16:16 - El complejo de Caín y el complejo de Abel desde una mirada política. / AHORA SÍ. Tanti Bianchi será candidato a Intendente en Esquina. / Dos años tratados como delincuentes. / Por un nuevo movimiento nacional, una fe de acero. / "Soy optimista con respecto al puente Monte Caseros-Bella Unión". / Equipo correntino de levantamiento olímpico de pesas valoró al fuerte apoyo oficial recibido a lo largo del año. / Argentina, Cuestión de Estado / El fisicoculturista correntino Benjamín Sotelo se destaca en el plano internacional / Cesión de soberanía jurídica y judicial. Una advertencia sobre el futuro de la concesión de la mal llamada "Hidrovía". / Creación del registro público de antecedentes laborales previo al ingreso al poder judicial. / Con apoyo oficial y merced a años de esfuerzo y perseverancia, Agostina Manzotti fue citada a la selección argentina de remo. / Sueños de libertad. / El candidato es Tassano. / Jorge Terrile recibió al piloto Benjamín Traverso. / Con apoyo oficial, equipo correntino de pesas se presentará en el Nacional de Bariloche. / A propósito de la reforma judicial en México y su cariz democrático-electoral. / Jorge Terrile recibió a los pesistas correntinos que se destacaron en el mundial de España. / Crítica a Joker 2 Folie à Deux sin spoilers. / Corrientes el único lugar del país dónde ninguna mujer integra el alto tribunal. / Se mojo la pólvora. /

  • 20º

ANÁLISIS

19 de agosto de 2015

No existen hechos, solo interpretaciones; Acerca del “Poronguismo”

Si primara alguna lógica para la construcción política, podríamos decir que la misma, sin ningún tapujo, debería denominarse “poronguismo”, trátese de la metodología de llegar a una posición de poder, a cualquier precio, preferentemente bajo el ala, el pantalón o la pollera de quién cuando muere, renuncia o da el visto bueno para que se ingrese a la esfera, la cocina del poder, entonces se da el paso al lugar al que lo sacarán muerto al ingresante, quién profundiza la sistematización de que, el primer escalón en el poder, es casi necesariamente, una escala que lo mantendrá de por vida en el sistema del poder, que no expulsa ni hecha a ninguno de sus miembros estables como tampoco permite el acceso por vías no autorizadas.

Una de las características peculiares del modelo imperante, de construcción y manejo político, es que, no expulsa ni tritura a quiénes han accedido al sistema, por más que circunstancialmente caigan en “desgracias” u olvidos momentáneos, hemos tenido gobernantes expulsados que retornaron mediante voto, otros presos que también regresaron por la misma vía, quiénes habíamos pensado que se jubilaron y sin embargo retornaron, y en definitiva, si se hiciera el listado de todos aquellos que ocuparon funciones o espacios de representación, del `83 a esta parte, veríamos, asombrosamente, como se repiten algoritmos, o mejor dicho nombres o patrones, pero no patrones de estadísticos o de probabilística sino patrones en el sentido lato y brutal del término.

Esta regla fundante de nuestro democrático sistema, viene en maridaje con otra, tan substancial y determinante como la descripta. Trátese del metodológico principio de como arribar, llegar o pertenecer al mundo, al espacio del poder. El sistema no permite, no tolera, no acepta, que se ingrese al selecto grupo, mediante acrobacias políticas, sociales o caminos que no estén debidamente aceptados, prefigurados o predeterminados. Debe ser uno de los pocos espacios, en donde incluso, el azar no tiene nada que hacer.

El sendero, la huella, la perspectiva a transitar, es una sola, y necesariamente está vinculada, mediante una soldadura de argón, al llegar de la mano de un poderoso, tutelado por alguien que forme parte del selecto grupo, que mediante muerte o traspaso/abdicación/aceptación de credenciales, le da el visto bueno al interesado, que como mínimo, debió haber transitado un considerable tiempo bajo su ala, o tras sus sombras, como para tener el derecho, además del natural, de querer pertenecer.

En este punto, debemos hacer un paréntesis, para que ciertos amigos, tenedores de sellos políticos inexistentes, que les hacen el caldo gordo a los popes legitimándolos en el supuesto momento sagrado y democrático del voto, puedan tratar de entender de qué se trata.

 Nunca serán concejales, o diputados, menos intendentes, por las suyas, por sus partiditos carachentos, conformados mediante el copiar y pegar de una o dos cartas orgánicas y del truchado sistemático de firmas, a los más que pueden aspirar, es a la adquisición de bolsas de mercadería, de algunos mangos las semanas previas, y de cargos de portero de escuela o de administrativo en alguna dependencia, si es que hacen un buen acuerdo político, y le aciertan con el ganador de la elección.

Alguno podrá decir, pero fulatino entro, por su sellito como legislador, y por supuesto que existen casos así, pero estamos haciendo o al menos intentado, un análisis del `83 a esta parte, y sí ponemos todos los partiditos, creados ad hoc, y todos los que “coronaron”  la proporción es inexistente. Y ese número, bajo, ínfimo, casi excepcional, se explica por esta lógica que estamos describiendo, no porque un iluminado escriba o imagine,  donde el sistema autoriza, mediante la aprobación de la metodología de entrar tras el ala, la pollera o el pantalón de un pope, de un consagrado, de uno/a, que ya este adentro.

Lo más grave o mejor dicho, lo más perfecto del sistema, es que cuando estos pichones ingresan a la cocina del poder, no sólo que son sus principales defensores (imagínense la cantidad de agachadas y de indignidades, que tuvieron que tolerar o aguantarse) sino que siempre van un grado más, un ajuste más de tuerca, una vueltita por las dudas, y todo lo que hagan, sea bueno, malo, regular o peor, siempre tendrá como resultado que incrementarán el poder. De allí que las disputas políticas no tienen asidero argumental, ideológico o de propuestas, de allí que toda pretensión de hacerlos enfrentar mediante plataformas de gobierno, de que debatan y expongan sus proyectos a la comunidad es una soberana pelotudez que sostenemos algunos para seguir haciéndonos los boludos y por ende cómplices del sistema.

Esto explica lo que usted, exclama, cuando escucha lee, o mira, que otra vez, fulano es legislador, o fue designado como parte de un gabinete, esta es la radiografía que señala a las claras como funciona nuestro sistema político, del que en verdad, estamos mucho más orgullosos y complacidos de lo que expresamos en los medios de comunicación.

Mejor dicho, cuando ciertos alcahuetes del poder, encienden las alarmas de sus patrones, para que se dejen de decir ciertas cosas, estos saben por dónde entrarle a los que hablan, dando a entender que más que una hablada es una solicitud, rayana con la extorsión, una actividad aceptada también, y muy, por el sistema político imperante.

 Claro que no todos escribimos para eso o solo por eso, algunos también lo hacemos por lo siguiente que alecciona el filósofo alemán citado.

“La escritura, y la literatura en cuanto que participa de ella, es la comprensibilidad del espíritu más volcada hacia lo extraño. No hay nada que sea una huella tan pura del espíritu como la escritura, y nada esta tan absolutamente referido al espíritu  comprometedor como ella. En su desciframiento e interpretación ocurre un milagro: la transformación de algo extraño y muerto en un ser absolutamente familiar y coetáneo. Ningún otro género de tradición que nos llegue del pasado se parece a éste. Las reliquias de una vida pasada, los restos de edificios, instrumentos, el contenido de los enterramientos, han sufrido la erosión de los vendavales del tiempo que han pasado por ellos; en cambio la tradición escrita, desde el momento en que se descifra y se lee, es tan espíritu puro que nos habla como si fuera actual. Por eso la capacidad de lectura, que es la de entenderse con lo escrito, es como un arte secreto, como un hechizo que nos ata y nos suelta. En él aparecen cancelados el espacio y el tiempo. El que sabe leer lo transmitido por escrito atestigua y realiza la pura actualidad del pasado” (Hans Gadamer).

 

COMPARTIR:

Comentarios

Escribir un comentario »

Aun no hay comentarios, s�� el primero en escribir uno!