19 de julio de 2018

¿Cuál sería la función del foro de los intendentes del PJ?

Antes de Ricardo Colombi, los jefes comunales no eran más que meros representantes simbólicos de la política local. El mercedeño, paso por su intendencia mediante, al arribar al sillón de Ferré, no sólo que empoderó sino que los ungió a una suerte de monte del olimpo a sus otrora pares y catalizo mediante ellos una marca registrada de su impronta o gesta política. Decir intendentes o municipalismo, es sinónimo de Ricardo Colombi. Algunos de sus socios minoritarios, a pedir del mandamás político, se agruparon en esta suerte de foros, y de allí surgieron valiosos hombres y mujeres, de partidos integrantes de Eco, que supieron usar esta máscara de lo democrático, una de las preferidas de la marca registrada del colombismo. Marca que por otra parte, continúa mediante el gobierno de Gustavo Valdés, quién a pedir de boca, logro que sus regentes peronistas en la campaña electoral (los de la llamada liga del norte, que aglutinó a los jefes comunales de Ramada Paso, Itatí, Loreto, Berón, Olivari) se sumaran o sumaran al resto de los intendentes del PJ. Lentos y perezosos, estos, salieron rápido a los medios (pagos por el gobierno provincial) a dejar en claro que no harían una oposición, sino constructiva, o lo que es lo mismo, edulcorada o afrancesada al gobierno de Valdés.

Lo paradigmático, en el colmo de la torpeza política, es que los mascarones de proa de esta nueva intentona del uso, como se hace mediante el sinónimo de profiláctico (el forro) por parte de los radicales gobernantes a los peronistas sin poder o con el poder licuado, es que eran hasta no hace mucho, las bastoneras locales del proyecto nacional y popular K.

Recordemos para los desmemoriados, que este proyecto, filosóficamente (Laclau y Mouffé, mediante) se nutría de la política como el entendimiento de lo agonal, de lo conflictivo. De hecho dejaron ex profeso, la actual y conocida grieta de la que siguen nutriendo cierto marco de actores políticos, “carancheando” rédito politiqueril para sus proyectos personalísimos.

Este nuevo acto sexual que en la lógica machista-patriarcal, pretende sodomizar al pejotismo o peronismo pseudo opositor, lo quiere de rodillas, en cuatro, para, otra vez, acabarlo, dejándolo a lo sumo, en la mejor posición de la vicegobernación.

No es extraño, que se salgan a armar, casi de apuro, reuniones en pueblos, a nivel peso electoral, inexistentes, para que este manojo de jefes comunales, pretenda ser una cortesana, cuando no cabaretera, acodada en la barra del gobierno radical, a la espera de saciar los más bajos instintos de los gobernantes que ya llevan dos décadas en el poder, gracias a la acción y omisión de tipos que se dijeron y se dicen peronistas pero que le son funcionales a los radicales entongados en el poder.

No se necesita haber leído ni Paturuzú, para saber que a los intendentes, los maneja el gobernador con la coparticipación y más si tiene alineado el gobierno nacional. No se necesita ser muy despierto, para recordar que con la misma lógica, o trampa puesta por Ricardo (recordemos que este es su sistema, sus reglas) se perdieron las intendencias más densamente pobladas (Capital, Goya, Curuzú, Ituzaingó) y que es poco más que una complicidad que no se puede disfrazar, el pretender reconstruir el PJ opositor, mediante un manojo de intendencias desválidas para la lógica del poder (peso territorial) y al servicio del poder central (provincial y nacional).

A lo compañeros intendentes, sí es que tienen dignidad, y se dicen tales, que se dediquen a gobernar sus ciudades y pueblos, que a la política local se le debe prestar atención y dedicación permanente, y para ello, está y existe le figura de los dirigentes. Esta figura política, a diferencia de la preponderancia de los “intendentes” no salió del pelo de ningún radical, sino del manual de conducción política del general.

 

Foro de Dirigentes Peronistas.

  


Comentarios »
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!
Escribir un comentario »