Mi columna de opinión.

Aridez, dura tierra bajo los pies, la política de aldea es consciente, se vienen tiempos de definición, no hacia afuera porque nada hacen extramuros, ninguna lista se somete al escrutinio del votante o elector, se cuaja el yogurt bajo un sauce llorón, los propios del intestino mismo, pero como intestino que es, todo termina en la apéndice, inútil como ninguna, son los tiempos de los candidatos floridos, nada nuevo bajo el sol, será este o aquel, lo cierto es que será el que se elija en un cuarto oscuro, pero no el del domingo electoral, es un cuarto oscuro donde se reúnen menos de cinco almas en pena narcotizadas de power, a tantear alfileres parados de punta. En toda alianza lo que nunca hay es alianza, lo que hay son fines a seguir y concretar, lo que hay es voluntad útil. Camuflaos tropa mía, hagáis del consensus su piedra punzante del zapato brillosin de los más capitos, de los gomosos sellos electorales. Todo cólico renal se combate con una buena dieta y si es legislativa mucho mejor.

Los mejores exponentes se presentan consolidados en el oficialismo, tanto en sus vertiente liberal con las hormigas, la vertiente hibrida, como la  pata de palo peronista que es la más estable y pura, no hay argentinidad posible sin peronismo, por demás festejará Don Juan cuando pueda hacer volver a la cúspide de la entelequia a un militante de su causa.

¡Oh! Sacrosanta literatura correntina, pura y única de aromas chamanicos, únicos, poesía libertaria y guaranítica, denunciadora del yugo colonial, revolucionaria y cuentista como ninguna, jugada hasta el último bello que supo crecer ahí donde no da el sol. ¡Oh! Señora de pulidos pómulos, de labios dulces como el botox, literatura imprescindible como cuando se quita un dedo del agua, orgásmica del ocio ¿Qué haríamos sin usted, bella como un picaflor en Siberia? La oposición sabe con meridiana claridad que deberá definir sus hombres y mujeres que disputarán el sillón de Ferré que por el momento, es terreno inconquistable, en eso están trabajando duramente para llegar, aunque sea escupiendo sangre, parte del proceso es despegarse del kirchnerismo romo y duro que termina siendo un lastre con sus noticias diarias de corruptela. Los candidatos del PJ están más que definidos por estas horas, no hay duda sobre ellos puertas adentro, simplemente falta definirlos orgánicamente. Para ello se cuenta con una pócima mágica que cubrirá de luz la cuestión ¡Oh encuesta, señora de las verdades, ninfa de la luz, oh mi señora encuesta, certera como el sol de cada día, usted que anda por el mundo gozosa de errancia, literata y sabia en tiempos difíciles, correntina como el mate cocido, poetiza oficial, degenerada el domingo electoral.

Así se presenta el corto plazo en la provincia, el próximo gobernador seguirá, por el momento, durando cuatro años, el oficialismo cuenta con el hombre que más votos recolecta simplemente con su apellido, sin moverse de su casa, ya es marca registrada, mientras que en la vereda de enfrente José López que navega en aguas turbias y sin timonel no para de complicar la cuestión, tendrán, sin escapatoria posible, que abroquelarse, encauzar las subjetividades en el mismo fin, copar la casa de gobierno el 10 de diciembre de 2017, en solitario y haciendo el don pirulero Eco los aplastara electoralmente como lo viene haciendo hace 16 años.

Y aparece, como estrella fugaz, como relámpago en noche oscura la única salvación posible para los herederos de Pedro canoero, esa dama blanquecina y diametralmente opuesta, la que insiste en que existe pero nunca dijo para que, literatura correntina, autóctona y salvaguarda de la libertad, tertuliana y adicta a recintos húmedos, bonachona,  amiga del que tiene el látigo, violada, ultrajada, raíz cuadrada del síndrome de Estocolmo, libre pero en su jaula.

Por Carlos A. Coria Garcia